¿Qué escribís?
¿Ahora?
Sí. ¿Qué escribís? ¿Cosas de otros?
No, cosas mías.
¿Qué? ¿Cuentos, relatos?
No, poesía.
No sabía que escribías poesía.
Yo tampoco sabía.
¿Qué escribís?
¿Ahora?
Sí. ¿Qué escribís? ¿Cosas de otros?
No, cosas mías.
¿Qué? ¿Cuentos, relatos?
No, poesía.
No sabía que escribías poesía.
Yo tampoco sabía.
Una extrañeza
me arrebata
este domingo
de sordo ventanal.
Que muta
en Día Después.
Domingo de Ramos
ceremonia solemne
para guardar las
palmas
hasta el próximo
carnaval.
Domingo
después de Talcahuano
de furia impiadosa,
de sed,
de cuerpos vivos,
desamparados.
Nuevo trabajo (para bien y para mal) me tiene lejos de este paraje. Hoy tocó descansar. Día de suerte.